Artículos y propuestas :: Educación
La crítica de una educación represiva y tóxica como la actual
Madrid, 15 de enero de 2014
Por Liberta
La que será una de las grandes obras de Jean Vigo (1903-1934) "Zéro de conduite", se inspira en gran medida en las experiencias personales del cineasta, que pasó gran parte de su infancia en internados. De hecho, "Zéro de conduite" es un ejemplo de las amplias propuestas educativas anarquistas, donde trata de vincularse la búsqueda de la espontaneidad en la infancia, uniendo lo lúdico con la búsqueda de conocimiento, con las más bellas aspiraciones sociales. En el film, puede verse una obvia analogía entre escuela y prisión cuando se muestra un internado triste y espartano ; la conformidad, el gusto por el orden y la disciplina, así como una permanente vigilancia institucional que causa pavor en los chavales, obliga a contemplar el centro educativo como un trasunto del Estado en una crítica claramente anarquista. Vigo emplea en la película un tono claustrofóbico, lo que muestra de forma cristalina su opinión burocrática acerca de la escuela, así como un distanciamiento respecto a los personajes más autoritarios ; existe además una férrea división entre el aula, lugar del conocimiento, y el patio de recreo, espacio para lo lúdico, algo que tratará de transgredirse en alguna significativas secuencias a lo largo del film.